El 7 de junio, durante mitin en un barrio popular de Bogotá, un presunto sicario de 15 años le disparó tres veces, sin que se conozcan los motivos. Dos de las balas impactaron su cabeza. Las autoridades han capturado a seis sospechosos relacionados con el ataque y apuntan a una disidencia de la extinta guerrilla FARC como posibles autores intelectuales. Uribe deja un hijo pequeño y a tres adolescentes hijas de su esposa, que acogió como propias. «Hoy es un día triste para el país», dijo el lunes la vicepresidenta colombiana, Francia Márquez, en un mensaje en la red social X.